Los Contextos Históricos de las Investigaciones
Antropológicas y Arqueológicas de Extranjeros en Honduras Nororiental-Zona de
la Ciudad Blanca de 1915 a 1940 (Versión 14 Marzo 2017)
De Wendy Griffin
Introducción
En 1892 el mundo celebró los 400 años del descubrimiento de
las Américas por Cristóbal Colon. Una parte de esta celebración Columbina era
la Exposición Universal de Chicago en
los EE. UU. en 1893, un tipo de “feria mundial”. Los millonarios de
Chicago pusieron el dinero para construir centros de exhibiciones que
incluyeron un centro de horticultura y un centro de Antropología, incluyendo la
Arqueología. En el centro de horticultura había una mata de bananos (Chapman,
2009). Aun no se había superado el problema de cómo hacer llegar al norte de los EE. UU. los bananos antes que
maduraron (un problema que se resolvió en 1904 con la introducción de barcos de
vapores con refrigeración de las compañías fruteras), entonces generalmente era
la primera vez que los 27 millones de visitantes a la Exposición Universal que
duró seis meses lograron conocer a primera mano los bananos, que jugarán tanta
importancia en la historia de Honduras.
También en la Exposición Universal de Chicago, Honduras estaba representado por piezas
arqueológicas de Copan Ruinas. El encargado de la Sala de Antropología, F. W.
Putnam, un profesor de antropología de la Universidad de Harvard y Director del
Museo Peabody de Harvard, había mandado sus estudiantes de antropología a
diferentes puntos del mundo para recoger las maravillas allí para mostrarlas en la Exhibición
Universal. Marshall Saville, quien más
tarde continuó en una carrera exitosa en la nueva disciplina de arqueología,
fue el estudiante de Harvard quien hizo las excavaciones en 1891, junto con
ayudantes Maya Chortís, para obtener estas primeras piezas de Copan en esta
exhibición en los EE. UU. Todas las
piezas de Antropología de la Exposición Universal fueron adquiridas por los
ricos de Chicago a la sugerencia de F.W. Putnam para mantenerlas en un Museo en
esta ciudad, ahora llamada el Museo Field de Historia Natural. Este Museo
jugará un papel en interesar investigadores futuros de la zona de la Ciudad
Blanca como Eduard Conzemius y William Duncan Strong para conocer qué culturas,
además de los Mayas, vivieron en Honduras.
Ya por primera vez en vivo estaban juntos los dos elementos
principales de cómo era Honduras en el
imaginario de los norteamericanos. Probablemente los líderes de Honduras de
aquella época, inmersos en este periodo en proyectos de la Reforma Liberal de
fomentar el desarrollo a través de la exportación de productos primarios, se
sentían orgullosos de ser representados en la Exposición Universal frente a
muchos posibles inversionistas extranjeros. Productores norteamericanos y europeos de
muchos productos, aún en existencia, mostraron sus productos nuevos para celebrar el ingenio de sus inventores y
la época de progreso que, con estas nuevas invenciones, pensaban que iba a
arrancar.
En Centroamérica
también celebraban los 400 años del descubrimiento de las Américas. En
Guatemala parte de la conmemoración era la publicación de un documento colonial inédito “La Recopilación Florida” de
historiador guatemalteco Fuentes Guzmán (de Fuentes Guzman,1882). Él era descendiente directo del conquistador Bernal Díaz del
Castillo, pero el incluyó en su historia de la colonia de la Capitanía General
de Guatemala información de historia oral de indígenas además de
conquistadores. Pero el editor de Fuentes Guzmán hizo una reflección que
también será un motivo para los futuros exploradores de Honduras. El escribió
que en el pequeño país de Guatemala aún tenían millones de indígenas, mientras
en el censo de 1890 de los EE. UU. solamente quedaron 50,000 indígenas en este
país del norte mucho más grande. Él pensaba que los españoles coloniales, a
pesar de todas sus fallas, hicieron algo mejor para sus indígenas que las
políticas de los blancos de los EE. UU. que les quedaron tan poquitos indígenas
en su territorio inmenso(de Fuentes Guzman,1882).
La Motivación del Trabajo Antropológico al Comienzo del
Siglo 20
Era interesante la decisión de incluir un centro de
Antropología en la Exposición Universal. Era una carrera nueva, asociada con
museos importantes de la Costa Este de los EE. UU. Entre los antropólogos, había una
preocupación que estaba reduciéndose tanta la población indígena
norteamericana, en parte por azotes de enfermedades europeas, que los indígenas
norteamericanos pudieron desaparecer.
Entre la población en general existía la idea que tal vez sería necesario
de eliminar los indígenas norteamericanos para lograr el soñaba desarrollo. Aún
si no los eliminaron, el “progreso” (sin mencionar una educación para los
indígenas dedicada a borrar sus culturas y sus lenguas—Thomas, 2016) estaba
causando que los indígenas norteamericanos perdieron sus culturas
tradicionales, un fenómeno que estaba afectando en aquel tiempo otras partes
del planeta con la expansión de negocios
de compañías europeas y norteamericanas.
Los antropólogos se dieron la tarea de tratar de recoger ejemplos de
artesanía indígena y documentar parte de la cultura y lenguas indígenas antes
que desaparecieron frente al “progreso”.
Parte de esta tarea era documentar las lenguas indígenas que ya al final
del siglo 19 estaba comenzando a desaparecer en los EE.UU.
(Otros críticos más tarde dirán que este problema fue
causado por políticas racistas del gobierno de los EE.UU. como permitir la
destrucción del hábitat o recursos naturales de los indígenas, de forzarles
trasladarse a vivir fuera de la zona ecológica donde desarrollaron sus
culturas, implementar políticas educativas para forzarles perder sus lenguas,
separarlos de sus padres y mandarles a escuelas distantes para que no aprenden
las culturas de sus antepasados, guerras en contra de los indígenas, no
protegerles si fueron asesinados, etc. Ni los hombres de negocios, ni el
gobierno de los EE.UU. iban a tratar
mejor a los indígenas y los negros de los países de América Central de una mejor
manera que trataron a estos pueblos en su propio país.)
La Motivación de Trabajos Arqueológicos al Comienzo del
Siglo 20
Los arqueólogos norteamericanos se sintieron que los sitios
arqueológicos que ellos estudiaban también estaban amenazados por el avance de
“progreso”. Uno de los usos del nuevo tractor que se
había inventado era nivelar los montículos que habían dejados en gran parte del
sur y este de los EE. UU. los indígenas precolombinos de este país para
permitir la agricultura extensiva y mecanizada. Ya en 1924 en los EE.UU. había
colecciones de artefactos arqueológicos de indígenas hondureños que había sido
encontradas principalmente en los campos bananeros de Honduras noroccidental
como la colección que donó Samuel Zemurray, presidente de la Cuyamel Fruit en
el Departamento de Cortés, Honduras, al
Instituto de Investigación Mesoamericana (MARI)
que el dio el dinero para fundar en la Universidad de Tulane en Nueva
Orleans. Según un estudiante de Tulane, 60% de la colección de MARI es de
Honduras. El interés de Zemurray en la arqueología debajo de las matas bananeras
inspiró a su hija Doris Zemurray Stone, autora de 28 libros y docenas de
artículos sobre arqueología (Worldcat, sin fecha), a dedicar la mayoría de su vida a la
arqueología y antropología de América Central.
Arqueólogos, Antropólogos y Otros Viajeros Extranjeros Dan a
Conocer Las Riquezas del País y Como Llegar donde estas Riquezas
Desde el siglo 19 existía un género de libros de viajeros a
Honduras, que dan a conocer las riquezas del país, particularmente la zona
Norte, para generar interés en posibles inversionistas extranjeros. Estos
viajeros mencionan generalmente los tipos de árboles maderables, el hule, las
minas de oro, plata, y ópolos en el país, y las posibilidades de la agricultura
de exportación como los bananos o el café.
Aún libros principalmente sobre indígenas como los de Conzemius (1932)
mencionan las industrias que se desarrollan o pueden desarrollarse en la zona
indígena. Según Antonio Vallejo (1887),
el gobierno de Honduras consideró sus ruinas arqueológicas como las Ruinas de
Copan como una de las riquezas del país.
Aún el censo de 1887 y la publicación del Primer Anuario Estadístico de
Honduras de 1889 eran para dar a conocer otra riqueza que tenía el país, su
población o sea la mano de obra para cualquier proyecto de inversión
(Vallejo,1887).
Mientras ciertos sectores del público de los EE.UU. y
en Honduras miraron con buenos ojos los
avances de compañías mineras, madereras, huleras, y bananeras norteamericanas
en Honduras, a ciertos individuos norteamericanos se sentían una curiosidad y una
urgencia de saber lo que había de los indígenas hondureños, sus culturas, sus
lenguas, su arqueología, antes que fue
cambiado por siempre por la llegada del “progreso” que tanto afectó a los
indígenas de los EE.UU..
Otros Actores en Expediciones y Publicaciones Arqueológicas
y Antropológicas—Museos, Editoriales, y los Ricos que los Financiaron en el
exterior y en Honduras el gobierno y los cooperantes indígenas
En cada proyecto grande como ser una expedición arqueológica
o antropológica a otro país que resultaría en colecciones para Museos y
publicaciones, era necesario unir esfuerzos con muchas personas e
instituciones, cada quien con su propia motivación por que participan. Veremos
que los tempranos arqueólogos y antropólogos y exploradores tenían sus motivos
porque fueron a Honduras nororiental, pero también era importante las
motivaciones de las personas ricas o líderes políticos que fundaron los Museos,
quienes financiaron expediciones a América Central, las motivaciones de
editoriales por que publican las investigaciones de ciertas personas, mientras
a otras personas no, y las motivaciones de los lectores por que compraron el
libro, o revista donde se publicó el informe de los resultados de las
expediciones.
Honduras tenía sus motivaciones por que autorizaron las
expediciones. Los indígenas locales tenían sus motivaciones por que aceptaron
dar información, permiso, apoyo
logístico y mano de obra a los
extranjeros que encontraron en sus comunidades. Estas expediciones de
extranjeros en Honduras nororiental, como todas nuestras acciones, tenían
consecuencias, las cuales pueden ser vistas como positivas o negativas,
dependiendo de su punto de vista.
¿Por qué Principalmente Eran los Extranjeros que Estudiaron
la Arqueología y Antropología de Honduras al Comienzo del Siglo 20?
Las carreras de Arqueología y Antropología como carreras
universitarias eran nuevas al final del siglo 19. Surgen, en parte, para suplir
las necesidades de personal calificado para Museos, algo también nuevo en el
siglo 19 en los EE.UU. y en Europa.
Muchos de estos primeros Museos (Chicago, Nueva York, Pittsburgh, el
Smithsonian en Washington, DC, el Museo Peabody de Yale) eran Museos de Historia Natural, que
incluyeron elementos de la botánica, la zoología, la geología, y de los
indígenas que utilizaron los productos naturales en su entorno para crear sus
artesanías y los artefactos arqueológicos.
Estos Museos como sus nombres implican--el Museo Carnegie de
Pittsburgh, el Museo Peabody de Harvard, el Museo Field de Chicago, el Museo Smithsonian, el
Museo Heye de Nueva York, eran los resultados de donaciones de personas que
lograron hacerse ricos en las oportunidades económicas del siglo 19 y el comienzo del siglo 20. Los centros universitarios norteamericanos que
dominaron la arqueología hondureña como Harvard, Columbia, la Universidad de Pennsylvania, y Tulane eran universidades
privadas de primera categoría, que además de las matriculas caras que reciben, dependen
de donaciones privadas.
Ahora, generalmente, las donaciones privadas a universidades
norteamericanas son por personas egresadas de esta universidad, pero en el
pasado los ricos norteamericanos, la mayoría de los cuales como Samuel Zemurray
no eran egresados universitarios, hicieron donaciones a sus universidades
locales para fortalecer carreras que les interesaban. Había interés de
fortalecer museos y programas de arqueología y antropología o Historia Natural
por parte de ricos estadounidenses, entonces estos crecieron. También eran populares libros sobre viajes en
el exterior, e indígenas de la actualidad y en el pasado, entonces valió la
pena facilitar que otros hagan estos viajes o investigaciones, escribir y
publicar estos tipos de libros. Los Museos querían argumentar que ellos tenían
las mejoras colecciones, que sus universidades produjeron los mejores
académicos, que sus profesores y exalumnos publicaron los informes de mayor
importancia. A través del renombre, ellos pudieron lograr más alumnos, los
mejores profesores, más matricula, y más donaciones.
Antes de 1956, Honduras tenía una sola universidad, la UNAH,
con sede en Tegucigalpa. Todavía en la década de1950, la UNAH solamente ofreció
dos carreras—Derecho y Medicina (Antonieta Máximo, comunicación personal). Pocos
hondureños tenían la oportunidad de estudiar a este nivel, porque generalmente
solamente había un Instituto público por departamento, y unos departamentos
como Islas de la Bahía y Gracias a Dios no contaban con institutos públicos
hasta la década de 1990. Entonces no había mucho mercado para libros de autores
hondureños y pocas personas capacitadas hasta el nivel para lograr ser autores.
Si tuvieron la posibilidad económica de estudiar en el exterior, no estudiaron
antropología o arqueología antes de 1956 y la fundación del IHAH (Frewen, 2012)
(y la Escuela Superior del Profesorado,
ahora UPN, que ofrece la Carrera de Estudios Sociales, Elizabeth Meigham,
comunicación personal), porque no había donde trabajar y ser pagado para ser
antropólogo o arqueólogo en Honduras.
Hasta hoy en día las pocas personas que publican libros
sobre los indígenas de Honduras hablan de las dificultades económicas de hacer
las investigaciones de su bolsa, que no hay en Honduras mecanismos de apoyo
como fundaciones privadas o escasos fondos del gobierno para hacer estas
investigaciones. También la publicación de los resultados de las
investigaciones resulta difícil en Honduras, que si no logra el apoyo de algún
ente del Estado, incluyendo los editoriales de las universidades públicas, los
investigadores hondureños tienen que autofinanciar no solamente la
investigación, el tiempo para escribir el libro, pero también la publicación de
sus libros. Los investigadores hondureños enfrentan grandes desafíos en
comparación a sus colegas norteamericanos, incluyendo que sus trabajos normales
pagan tan poquito, que muchas veces tienen que trabajar dos trabajos para pagar
los gastos de su hogar. Es difícil así encontrar el tiempo para escribir e
investigar. En Honduras la publicación de su investigación generalmente
resulta poco rentable para el escritor,
particularmente comparado a los gastos de haber hecho la investigación. Es
generalmente necesaria otra motivación, y no una motivación económica, para que
un hondureño escriba y publique sus investigaciones sobre los indígenas o la
arqueología de Honduras.
Honduras era un país tan
pobre y con tan poco personal capacitado al comienzo del siglo 20 que el
Presidente Carias pidió ayuda de la Fundación Heye de Nueva York para estudiar
los Miskitos y sus artesanías en la década de 1930 para el Museo Nacional que
él quería fomentar (Raphael, 1934) Aún
no existía USAID ni el programa de becas Fulbright ni el Banco Mundial o el BID
, fuentes actuales para el trabajo arqueológico en Honduras, que todos comenzaron después de la Segunda
Guerra Mundial. Este primer Museo Nacional de Honduras también se cerró por la
pobreza del país que el gobierno no pudo dar mantenimiento al edificio, y se
ruinaron las colecciones por goteras del techo del Museo (Frewen, 2012).
Motivaciones de Nacionalismo o de Recordar la Gloria del
Pasado en la construcción de Museos y Parques Arqueológicos en Honduras como
parte de la Construcción de la Identidad Nacional
Veremos que los gobiernos de Honduras y de los EE.UU. también
tenían motivaciones para fomentar Museos y ciertos tipos de publicaciones
durante la primera mitad del siglo 20. Por adentro del país este puede incluir
querer construir y contar una historia
del pasado glorioso del país que fomenta la creación de buena auto-estima
dentro de los pobladores. Si somos
descendientes de tan inteligentes antepasados, podemos lograr grandes cosas
nosotros también. Mostrando el contenido de los Museos hacia los visitantes del exterior, que muchas
veces han tenido una actitud de desprecio hacia los hondureños, se puede
presentar también los logros gloriosos de los antepasados para mostrar que los
hondureños modernos sus descendientes merecen respeto en el presente.
Teorías Racistas del Comienzo del Siglo 20 y el Uso de
Restos Arqueológicos para Argumentar en su Contra
Las ruinas mesoamericanas en particular eran utilizados para
contestar teorías racistas del comienzo del siglo 20 de las causas de la
pobreza de los países subdesarrollados,
que según estas teorías, eran subdesarrollados porque eran inhabitados por
“razas inferiores” como negros, indígenas, y chinos(Rolland Paulston,
comunicación personal), por ejemplo por los seguidores de políticas de
eugenesia (Eugenesia en Estados Unidos) y racismo científico (Racismo Científico).
Parte de esta teoría es que era caliente el clima de estos países tropicales, entonces la gente
local eran pocos energéticos por haber adoptado al calor.
Políticas de los Países Centroamericanos que Reflejaban la
Influencia de Racismo Científico
Hay mucha evidencia que estas ideas racistas existieron en
Honduras y en otros países centroamericanos por ejemplo políticas en contra de
la migración de negros y otras razas indeseables a América Central (Euraque,
2004, Gudmundson & Wolfe,
2012), políticas y libros tratando de atraer colonos “energéticos” como los europeos a Honduras, y
discusiones intelectuales sobre qué hacer con el problema indígena (y china y
negra) en América Central (Martínez, sin
fecha). Conzemius refleja sobre el efecto del calor sobre los habitantes de la
Moskitia a quienes él creía que no tenía la energía natural que el frio dio a
los europeos y los norteamericanos (Conzemius, 1932).
Los países del sur de
América Central como Honduras, El
Salvador, Nicaragua, y Costa Rica intentaron esconder la existencia moderna de
“razas inferiores” como indígenas, negros, y chinos en sus países, eliminando antes
de 1940 las categorías raciales de los censos nacionales. Desaparecieron estos grupos de las historias
oficiales de estos países. Después de la Matanza de 1932 en El Salvador de
miles de indígenas, se hizo ilegal ser indígena—no era permitido usar vestuario
típico, era prohibido hablar idiomas indígenas, no era posible declarar sus
hijos indígenas en las partidas de nacimiento, etc. Según el discurso oficial
de El Salvador ellos ya no tenían “un problema indígena” o “un problema negro”,
porque era un país 100% mestizo, que ya no había indígenas.
Costa Rica rehízo su historia como casi todos los pobladores
actuales de Costa Rica eran descendientes de blancos europeos, entonces ellos
tampoco tenían un “problema indígena” o ”un problema negro”, entonces la
historiadora Costa Ricense Rina Caceres sentía mucha sorpresa de leer la
historia colonial de los Ladinos, y encontrar muchas referencias a negros,
mulatos, y morenos. En El Salvador cuando legalmente ya no
existían indígenas, este significó que no había herederos modernos de los
títulos de tierras coloniales extendidos a favor de los pueblos de indios, que
era posible dar estas tierras a caficultores
Ladinos. Este más tarde influyó la participación de estos desposeídos en
la guerra civil en El Salvador. El
antropólogo Mark Chapman sintió mucha sorpresa de descubrir 500,000 indígenas
salvadoreños invisibles en 1992. Aún en Guatemala famosos intelectuales
discutieron que pudieron hacer frente al “problema indígena” de este país.
En Honduras los gobiernos del comienzo del siglo 20 dieron
autorización a los ferrocarriles, plantaciones bananeras, estancias ganaderas,
cortes de coaba, y plantaciones huleras de extenderse hacia tierras de los
Garífunas, los Jicaques y Tolupanes, los Tawahkas, y los Miskitos sin cuidado,
diciendo que tales tierras eran deshabitados desde siempre y desiertos. Más
bien prometieron tierras gratis a extranjeros que prometieron dedicarse a la
exportación y ciudanía hondureña en un año si los extranjeros se asentaron en
tierras indígenas (Griffin, 1992).
Veremos que Presidente Carias pensó resolver su problema indígena y negra en la
Moskitia hondureña con un proyecto de colonización (de europeos), entonces
mandó a estudiar los Miskitos y obtener artesanías miskitas mientras aun
mantenían su cultura (Rafael, 1934). No
se preoccuparon los gobernantes de Honduras hacia donde iban a ir los indígenas
(y tampoco los mulatos en Yoro y Colon desde la colonia) desplazados por las
concesiones en su área. El gobierno
central mandó expediciones para descubrir las riquezas de la Moskitia para ser
capaces de darles en concesión o explotarlos de otra forma (Griffin,
1992).
Se enseñó que todos somos mestizos. Había una Mayanización
de la historia de Honduras, mientras lo cierto es que la mayoría de la historia
indígena de la colonia de Honduras lo protagonizaron más los Lencas, mientras
hasta 30% de la población era mulato (Euraque, 2004). Había una política de españolización de los
pueblos indígenas que aún hablaban su idioma y mantenían su cultura
tradicional. Por ejemplo, Alberto Membreño quien recolectó vocabulario indígena
de Honduras en su libro de Hondurenismos,
cuando era presidente dio énfasis de fundar misiones escolares entre los
Pech y los Tawahkas (Membreño, 1994), con resultados desastrosos para los
Tawahkas durante la epidemia de influenza española de 1918 donde había tantos
muertos que no quedaron suficientes vivos para enterrarlos todos en El Sumal,
lugar donde les habían forzado de asentarse para asistir a la escuela, quemando
sus aldeas tradicionales (Don Jacinto, comunicación personal). Tardó 30 años
antes que los indígenas permitieron fundar otra escuela hondureña en la Moskita
(Scott Wood, comunicación personal).
Estos tipos de ideas
sobre cómo resolver el “problema” de los Miskitos en la Moskitia, y que los
colonos que fueron allí adoptaron el estilo de vida de los sambos en vez de
colonos “civilizar” a los Miskitos continuó hasta 1961 y la resolución final de
la frontera Hondureña-Nicaraguense y la creación de la área Protegida de la
Ciudad Blanca a recomendación del Dr. Jesus Aquilar Paz, más tarde incorporado
en la Biosfera del Río Plátano. Danira Miralda Bulnés incluye en su libro “Latwan
Laka Danh Takisa: Los Pueblos originarios y la guerra de baja intensidad en el
territorio de la Moskitia, República de Honduras “ diferentes visiones
oficiales de la Moskitia y los Miskitos (Miralda Bulnes, 2012), todos muy
afectados por el racismo y el eurocentricismo típico de esta época tanto en los
EE. UU. cómo en América Central. El Dr.
Justin Wolfe en su artículo en el libro “La Negritud: Entre raza y raíces” muestra similares actitudes hacia los
Miskitos Nicaraguenses y la Moskitia Nicaraguense por parte de los gobernantes
e intelectuales de este país vecino (Gudmunson y Wolfe, 2012). Las secuelas de
estas teorías racistas y los remedios que los centroamericanos adoptaron para
resolver lo que teorías racistas del desarrollo identificaron como sus
“problemas indígenas” y “problemas negros” siguen afectando estos pueblos originarios
hasta hoy en día.
Uso de Ruinas Arqueológicas en Discursos para la
Construcción de una Identidad Nacional Positiva
Otra respuesta de los mexicanos y los centroamericanos era
de contestar que nuestros antepasados eran tan inteligentes y energéticas que
construyeron las ruinas mayas y aztecas antes de la llegada de europeos a este
continente, como parte del discurso de “mestizaje . La causa de nuestro
subdesarrollo actual tiene que ser otra causa y no porque somos de razas
inferiores. Las políticas de Presidente Tiburcio Carias en favor de crear el
Parque Arqueológico de Copan Ruinas (1934), el Parque La Concordia al estilo
Maya en Tegucigalpa, y mientras era Presidente del Congreso Nacional apoyar al
poner el nombre de Lempira a la monedad nacional eran ejemplos de tratar de
negar los discursos racistas de la época en contra de indígenas y mestizos
centroamericanos.
Según su sobrino tucayo Tiburcio Carias, el General Tiburcio
Carias Andino fue conocido como “El Indio de Bronce”. (Tiburcio Carias, comunicación
personal). A pesar de ser líder
nacionalista y un general victorioso, y más tarde presidente del Congreso
Nacional y luego Presidente de la
República, la correspondencia diplomática de la época de los 1920 y 1930
indican que los diplomáticas norteamericanos a veces no lo trataba bien por
pensar que el también era de “razas inferiores”. (Véase Euraque, 2004 y Euraque y Furias, 2010
por otras interpretaciones de estas políticas de Presidente Carias) . Las
secuelas de estas teoristas racistas de desarrollo y esta controversia todavía
están afectando las relaciones entre Centroamericanos y su vecino al Norte, los
EE. UU..
El uso de este
discurso que elevó a los Mayas muertos, e hizo invisible los indígenas y negros
modernos vivos de Honduras, y las contribuciones de indígenas no-Mayas y de los negros en el
pasado en Honduras es una política que el movimiento a favor de una educación
multilingüe pluricultural aún no ha logrado superar en las instancias encargada
de la cultura en el país (Frewen, 2012). Por ejemplo, el Instituto Hondureño de
Culturas Autóctonas y Populares del Ministerio de Cultura tuvo una vida muy
corta de año y medio. La Oficina de Folklor del ahora desaparecido Ministerio
de Cultura no incluye dentro de sus tareas la documentación del Folklor de las
etnias minoritarias del país. Hay apoyo económico del gobierno solamente para
festivales folklóricos solamente de los Ladinos de Honduras.
Museos en el Exterior con Colecciones Internacionales como
Símbolo del Poderío y Alcance del País
El gobierno de los EE.UU. ha fomentado la recopilación de todos
tipos información sobre otros países que puede resultar útil para fomentar sus
intereses, y los intereses de sus ciudanos y sus grandes empresas, en el mundo. Estos intereses incluyen
intereses económicos, políticos, militares, y científicos. Trabajan con el lema
“El conocimiento es poder.” Sus Museos y las publicaciones de sus Museos son
auxiliares para fomentar la educación popular, académica, y científica sobre lugares y pueblos con que
los estadounidenses están en contacto. Los Museos modernos continúan la
práctica de elites, en todo el Mundo de ahora y en el pasado, de recoger cosas
de lugares distantes y exóticos (en la periferia) para mostrar su riqueza, grandeza, y su poder
(en el Centro, en la metrópoli).
Resultado de la Distribución de Información y Piezas
Arqueológicas entre la Periferia y el Centro
Este ha causado una
falta de equidad en acceso a información. Por una parte las
publicaciones de arqueología y antropología y sobre muchos otros temas de Honduras están
en los idiomas del Centro (inglés, alemán, francés, y no en español), y están
ubicados en los Metropoli (EE.UU.,
Europa, Guatemala como capital de la Capitanía de América Central, y no en
Honduras, y mucho menos no en las comunidades indígenas). Cuando estos
arqueólogos y antropólogos estaban publicando en el exterior, principalmente
había dos bibliotecas en Honduras—la Biblioteca Nacional y la Biblioteca de la
UNAH, ambas con problemas de pobreza. Por
otra parte existe el problema que las piezas arqueológicas en si están en
lugares fuera del alcance de la mayoría de Hondureños por estar en Museos en el
exterior. Problemas de costo y pobreza
también afecta el acceso de los pobladores hondureños a los restos
arqueológicos hondureños aun si estos han quedado en Honduras.
La mayoría de la información disponible en Honduras es sobre
los Mayas de Copán, dejando afuera la arqueología de los Lencas, los Nahuas,
los Chorotegas, y los enigmáticos constructores de las ruinas arqueológicas de
la zona de la Ciudad Blanca en la zona nororiental en Honduras entre el área
donde se unen los departamentos modernos de Colón, Olancho, y Gracias a Dios.
Esta serie de ensayos darán acceso a Hondureños y otros lectores de español a
la información recopilada por los antropólogos y arqueólogos extranjeros en la
zona de la Ciudad Blanca, los contextos históricos en los cuales la información
fue recopilada, y una reflección que significa lo que encontraron estos
exploradores tempranos en relación a lo que sabemos ahora de la arqueología, la
etnohistoria, y las leyendas de la zona.
Los Búsquedores para
la Ciudad Blanca y Otras Grandes Ruinas en Honduras Nororiental 1915-1940,
donde quedaron sus colecciones de arqueología y quienes financiaron sus
expediciones.
Sylvanus Morley-aún no he descubierto que pasó con su
investigación arqueológico de la Costa Caribeña de América Central durante la
Primera Guerra Mundial, además de la parte que fue enviado a la oficina de ONI.
Eduard Conzemius-Etnógrafo. No llevó piezas arqueológicas,
solamente las describió. Parece que el
pagó sus propios gastos de viajes. Su libro sobre los Miskitos, los Sumus, y la arqueología de la Moskitia fue publicado
por el Instituto Smithsonian. Su
investigación sobre los Payas (Pech) que menciona al final La Ciudad Blanca,
fue publicado por una organización profesional europeo Asociación des Americanistes.
Herbert Spinden—arqueólogo. Las piezas arqueológicas en el
Museo Peabody de Harvard de la zona de la Ciudad Blanca, más otras piezas
hondureñas en el Museo Americano de Historia Natural, Nueva York.
Dr. William Duncan Strong-arqueólogo. Las piezas están en el
Museo de Historia Natural, Instituto Smithsonian, Washington, DC. Muchas se
pueden ver en su sitio de Internet. Esta expedición a Honduras Nororiental y
las Islas de la Bahía fue financiada por un estudiante de antropología de
Harvard que le acompañó. Las publicaciones sobre estas expediciones fueron
publicadas por el Instituto Smithsonian.
Capt. R. Stuart
Murray-aventurero. Las piezas están en el Museo Americano de Historia Natural,
Nueva York. Participó en dos expediciones que fueron financiado por la
Fundación Heye—el primero para traer piezas etnológicas de la Moskitia y la
segunda para buscar la Ciudad de Mono-Dios.
No hay información sobre si trajo piezas arqueológicas de regreso en la
colección del Museo Nacional del Indígena Americano en su sitio de Internet.
Frederick A. Mitchell Hodges-aventurero. Las piezas que
trajo de Islas de la Bahía en el Museo Nacional del Indígena Americano, parte
del Smithsonian, Washington, DC. El participó en dos expediciones para buscar
la Ciudad blanca que fueron financiados por la Fundación Heye, pero no hay
información sobre si trajo piezas arqueológicas de regreso en la colección del
Museo Nacional del Indígena Americano en su sitio de Internet.
Dr. Frederick Wilson Poponoe-botánico quien trabajó por la
United Fruit e hizo análisis de flora para proyectos arqueológicos. Las piezas
que el encontró en el Distrito de Río Tinto (Black River), División de
Trujillo, Colón, fueron donados al Museo Nacional de Historia Natural,
Smithsonian.
Theodore Morde, periodista y explorador, las piezas que
encontró están en el Museo Nacional del Indígena Americano, parte del
Smithsonian, Washington, DC, pero en su sitio de Internet solamente hay
información del cayuco y canalete Tawahka que trajo de regreso. Esta expedición
fue financiado por la Fundación Heye. La
publicación de su viaje en búsqueda de la Ciudad de Mono Dios fue publicada por
una revista popular que se distribuyó con los periódicos los días domingo.
Doris Zemurray Stone, antropóloga y arqueóloga, investigó la arqueología de la Costa Norte de
Honduras, incluyendo la zona nororiental de Honduras en Colon y Olancho. Los lugares que ella mencionaba en su libro
“La Arqueología de la Costa Norte de Honduras” que fue publicado por el Museo Peabody, son
lugares de piezas arqueológicas en la colección de MARI de Tulane, por ejemplo
el oferatorio de Jamasquire, Olancho y
Peroles Calientes. Ella no identifica como financió sus viajes en Honduras.
Dr. Junius Bird, arqueólogo, no buscó tierra adentro para la Ciudad Blanca,
pero estudió los montículos de caracoles que habían en la Costa Norte y en
Islas de la Bahía, que parecen ser áreas de la misma cultura de la zona de la
Ciudad Blanca. Su colección de piezas
arqueológicas hondureñas está en el Museo Nacional de Historia Natural, Nueva
York.
No sé quien donó las piezas de las zonas de Trujillo, Río
Tinto, Plátano y Río Patuca al MARI de la Universidad de Tulane, ni las piezas
del Río Aguan a la Universidad de Pennsylvania.
Los Museos
norteamericanos interesados en Arqueología Hondureña y Los Ricos que lo fundaron
En mi bitácora en español “Internet para Hondureños” hay
una lección sobre cómo utilizar el busquedor
de sitios de Internet “Google Chrome” o el traductor de Google para leer
sitios de Internet en inglés.
“Lección III Recursos para los que quieren estudiar
Música y Danza y Como traducir sitios de Internet” 2 de Marzo de 2015, Internet
para Hondureños, en http://www.historiahondurasindigena.blogspot.com/2015/03/lección-iii-recursos-para-los-que.html
Museo Americano de
Historia Natural
American Museum of Natural History (Museo American de
Historia Natural) (sin fecha) “Marshall Howard Saville” en www.
amnh.org/our-research/anthropology/collections/collection-history/meso-american-archaeology/Marshall-Howard-Saville Saville trabajó en Copan Ruinas en 1891 y
eran alumno de Frederic Putnam, director del Museo Peabody, de Harvard. Fue encargado de Arqueología
Centroamericano y Mexicano para el Museo Americano de Historia Natural de Nueva
York y en 1903 profesor Loubat de Arqueología Americana de la Universidad de
Columbia, Nueva York. El Duc de Loubat fundó la Sala de America Central y México
en el Museo Americano de Historia Natural en 1899. En 1907 el dejó el Museo
Americano de Historia Natural para trabajar para el Museo del Indígena
Americano de la Fundación Heye. Durante la Primera Guerra Mundial el trabajó en
Inteligencia Militar en Europa.
https://anthro.amhn.org/central Se puede buscar aquí para las más de 1,000
piezas arqueológicas que el Museo Americano de Historia Natural tiene de
Honduras. Incluye las Islas de la Bahía, valle de Ulua, de Jerico (actualmente
un barrio de Trujillo, Colon) de la expedición de Dr. Junius Bird (1931), y
unas piezas arqueológicas de piedras como cabezas de hacha, de piedra común y
de piedra verde, posiblemente de jade, de la expedición de Capt. R. Stuart
Murray al Rio Sico en 1933 para la Fundación Heye. Hay fotos y descripciones de
las piezas arqueológicas. Hay 51
páginas de la colección hondureña de este Museo.
“Joseph_Florimund_Loubat” en http://en.wikipedia.org/wiki/Joseph_Florimund_Loubat
. El financió la construcción de la Sala de Arqueología Mesoamericana en el
Museo Americano de Historia Natural y también financió plazas para profesores Loubat
de Arqueología Americana en la Universidad de Columbia, incluyendo Marshall
Saville y William Duncan Strong. Donó su colección personal de arqueología
mexicana de Oaxaca al Museo Americano de Historia Natural que el arqueólogo
Eduard Seeler le había conseguido para el. El dio propiedades con un valor de
más de un millón a la Universidad de Columbia.
Su padre había trabajado en proyectos de transporte en Nueva York y en
Francia. Fue titulado Duc de Loubat por el Papa Leo XIII en 1893.
Museo del Indígena
Americano de la Fundación Heye
“National Museum of the American Indian” (Museo Nacional del Indígena Americana) en https://en.wikipedia.org/wiki/National_Museum_of_the_American_Indian. La colección del Museo del Indígena Americano
de la Fundación Heye fue donado a este Museo Nacional del Indígena Americano,
Washington, DC, que forma parte del Smithsonian. Véase la sección del Smithsonian sobre como
mirar lo que tienen en su colección.
“George Gustav Heye” en https://en.wikipedia.org/wiki/George_Gustav_Heye.
George Gustav Heye (1874-1957) El fundador del Museo del Indígena Americano,
Nueva York. La Fundación Heye comenzó en
1916. El padre del señor Heye había hecho una fortuna en la industria petrolera
con Rockefeller, dueño de la Standard Oil, y el señor Heye era primero
ingeniero civil con un ferrocarril y luego banquero inversionista. En 1919 ya existió el Museo del Indígena Americano.
Heye logró coleccionar más de 1 millón de piezas arqueológicas y etnológicas,
la colección de artefactos sobre pueblos indígenas de las Américas privada más
grande en el mundo.
“Minor Cooper Keith” en http://en.wikipedia.org/wiki/Minor_Cooper_Kieth Minor Cooper Keith (1848-1929) también tenía su propia colección de artefactos arqueológicos
centroamericanos incluyendo piezas de oro de Costa Rica. La Fundación Heye
tenía una Junta Directiva que incluyó Minor Cooper Keith, vicepresidente y
cofundador de la United Fruit, en 1920. El donó sus colecciones de piezas de oro
precolumbina al Museo Americano de
Historia Natural en Nueva York.
Exhibición sobre Arqueología Centroamericana en el Museo
Nacional del Indígena Americano, “Minor Cooper Kieth”. El también donó parte de su colección de
piezas arqueológicas centroamericana al Museo de la Fundación Heye, que luego
pasaron a formar parte de la colección del Museo Nacional del Indígena
Americano, del Smithsonian, en Washington, DC.
Piezas arqueológicas de la colección privada del ex-presidente de
Honduras Marco Aurelio Soto por ejemplo una vasija de mármol de Ulúa también
formaban parte de la colección Heye y ahora están en Washington. Esta colección
incluye más de 16,000 piezas de alfareria centroamericana, incluyendo 10,000
intactos. También incluye las piezas que Theodore Morde llevó de la zona de la
Ciudad Blanca en 1940, bajo la clasificación “Chorotega”. El Museo Nacional del Indígena Americano
tiene una persona enlace para indígenas latinoamericanos.
Museos Peabody de
Harvard y de Yale
“George Peabody” en https://en.wikipedia.org/wiki/George_Peabody George Peabody (1795-1869), un banquero
norteamericano residente en Londres, financió los Museos Peabody de Yale y de
Harvard. Es considerado como un padre de
la filantropía. Donó el dinero para el
Museo Peabody de Harvard en 1866 y también el Museo Peabody de Yale en
1866. El Museo Peabody se inauguró en
1876. El era miembro de la Sociedad
Americana de Antiguarias. Ya que George Peabody no tuvo hijo varón, el aceptó
como socio Junius Morgan. Al jubilarse George Peabody quien retiró la mayoría
de su dinero del banco, el banco cambió su nombre a J.P. Morgan. El banco
comercial actual JP Morgan Chase y el banco inversionista actual Morgan Stanley
son los bancos actuales descendientes del banco fundado por George Peabody.
“Peabody Museum of Archaeology and Ethnology” (Museo
Peabody de Arqueologia y Etnología) en https://en.wikipedia.org/wiki/Peabody_Museum_of_Archaeology_and_Ethnology
“Peabody Museum of Archaeology and Ethnology” (Museo Peabody de Arqueología y Etnología) en https://www.peabody.harvard.edu/about No hay una manera fácil de ver por el Internet lo que
tienen en su colección. Tiene una fuerte colección de las ruinas de Copan. Dice
que también tienen piezas de Honduras Oriental. De la zona de la Ciudad Blanca
tienen un metate y una vasija cilíndrico de piedra de una investigación del
arqueólogo profesional Herbert Spinden al Río Plátano, según el artículo de
Wikipedia sobre La Ciudad Blanca.
“Francis Ward Putnam” en https://en.wikipedia.org/wiki/Frederic_Ward_Putnam Frederic Putnam (1839-1915). Era el
encargado del Museo Peabody de Harvard de 1874-1909. Era jefe del departamento de antropología
para la Exposición Universal de Chicago de1893. Se considera padre de
Arqueología Americana por su contribuciones y los excelentes estudiantes que
lograron adelantar esta carrera nueva.
“Francis Ward Putnam, American Anthropologist”
Encyclopedia Britannica en https://www.
Britannica.com/biography/Frederic_Ward_Putnam En 1894 el comezó a dedicar la mitad de su tiempo al Museo Americana de
Historia Natural en Nueva York. El
organizó el departamento de antropología de la Universidad de California,
Berkeley y su museo antropológico. El dirigió expediciones pioneras a México,
América Central, y América del Sur.
“Yale Peabody Museum of Natural History” (Museo Peabody de Historia Natural de Yale) en
peabody.yale.edu/about-us/misión-history.
Incluye la información sobre ser fundado por el Sr. George Peabody, un
banquero. Aún que este Museo no es
importante para la arqueología de Honduras, es de interés para conocer la
arqueología de los ancestros de los Garífunas en la Isla de San Vicente y
bajando la cuenca del Río Orinoco hasta
la cuenca del Río Amazonas.
Museo Field de
Historia Natural de Chicago
“World’s Columbian Exposition” (Exposición Mundial
Columbiana) en https://en.wikipedia.org/wiki/World%275_Columbian_Exposition
“Exposición Universal de Chicago (1893)” en https://es.wikipedia.org/wiki/Exposición_Universal_de_Chicago_(1893)
“Field Museum of Natural History” (Museo Field de
Historia Natural) en
https://en.wikipedia.org/wiki/Field_Museum_of_Natural_History
“Brief History of the Field Museum” (Breve Historia del Museo
Field) en https://www.fieldmuseum.org/about/history. Explica el papel de Marshall Field, un
comerciante exitoso, en la creación del
Museo Field de Chicago.
“World’s Columbian Exposition of 1893 Collection”
(Colección de la Exposición Mundial Colombiana de 1893) en https://www.fieldmuseum.org/node/5106.
No es posible ver el contenido de las colecciones del Museo Field en el
Internet.
MARI (El Instituto
de Investigación de Mesoamerica) de la Universidad de Tulane
“Middle American Research Institute of Tulane University,
General History” (Instituto de
Investigación de Mesoamerica de la Universidad de Tulane, Historia General) en https://www.tulane.edu/~mari/generalhistory.html Explica que Samuel Zemurray, dueño de la
Cuyamel Fruit en Honduras fundó el Instituto de Investigación de Mesoamerica en
1924. Doris Z. Stone (1909-1994) aún era una niña en aquel tiempo, entonces fue
el interés de su padre en la arqueología centroamericana que le animó a seguir
como carrera y trabajo durante la mayoría de su vida.
“Honduras, Middle American Research Institute at Tulane” (Honduras, Instituto de Investigación de
Mesoamerica en Tulane) en mari.tulane.edu/hondurasobj.html
Incluye una lista general de las colecciones que tienen
relacionado con Honduras que incluye Cortes,
Colon, Rio Negro, Peroles Calientes, Jerico en Trujillo, otros lugares
cerca a Trujillo, Olancho Valle de Agalta, Jamasquire, cerca a Catacamas, el
valle de Aguan, Gracias a Dios, Río Patuca y Río Plátano, etc.
Aún no hay fotos de su colección.
“History of the Roger Thayer Stone Center for Latin
American Studies” at https://web.archive.org/web/20080522064021/http://StoneCenter.tulane.edu/html/history/htm
En 1924 Samuel Zemurray donó a la Universidad de Tulane una
biblioteca sobre América Latina, artefactos arqueológicos, y los fundos para el
Departamento de Investigación sobre Mesoamérica. Este departamento fue fundado
para hace “investigaciones avanzadas en la historia (tanta indígena como
colonial), la arqueología, la botánica tropical (tanto económica como
medicinal), y sobre los recursos naturales y productos de los países que están
en frente de Nueva Orleans por el agua hacia el sur”. El Departamento de
Investigación sobre Mesoamérica cambió su nombre a MARI (Instituto de
Investigación de Mesoamerica) en 1941.
“Samuel Zemurray” en https://es.wikipedia.org/Samuel_Zemurray
“Doris Zemurray Stone” en https://en.wikipedia.org/wiki/Doris_Zemurray_Stone Doris Zemurray Stone (1909-1994), antropóloga
y arqueóloga. El Centro Stone de la
Universidad de Tulane lleva el nombre de su esposo Roger Thayer Stone.
Museo Nacional de
Historia Nacional, Instituto Smithsonian
“History of the Smithsonian Institution” (Historia de la
Institución Smithsonian) en www.si.edu/about/history Incluye la información sobre como fue fundado
la Institución Smithsonian con dinero de un rico inglés, el señor James Smithson.
“Chronology of Smithsonian History, First Smithsonian
Guidebook Published, September 1857 (Cronología de la Historia del Smithsonian,
Primero libro guía del Smithsonian publicado, Septiembre 1857), en
srris-sihistory.si.edu/ipac20/ipac.jsp?&menú=
“Secretaries Smithsonian” (Secretarios del Smithsonian) https://siarchives.si.edu/history/secretaries-smithsonian
“National Museum Natural History” (Museo Nacional de
Historia Natural) en https://siarchives.si.edu/history/national-museum-natural
-history.
“Department of Anthropology. A History of the
Department,1897-1997” (Departamento de Antropología. Una Historia del Departamento,
1897 a 1997) en anthropology.si.edu/outreach/depthist.html Spencer Baird mientras era secretario
asistente de la Institución Smithsonian hizo el primero intento de coleccionar
sistemáticamente material antropológico. Logró la creación de la División de
Antropología del Museo en 1883. Tenía tres divisiones—ethnología que incluyó
lingüística, Arqueología, y Antropología Física. En 1880 fundó la Sociedad Antropológico de
Washington, DC. En 1879 el Congreso
estableció el Buro de Etnología Americana separado del Museo Nacional, una
unidad de pura investigación—etnología, arqueología, y lingüística.
“Collections Search Center” (Centro de Búsqueda de las
Colecciones) en collections.si.edu./search/
Cuando va a esta página hay un espacio para poner lo que
busca, por ejemplo, Honduras, y luego haga click en el botón que dice “Search”
(Buscar). En esta búsqueda salen las
fotos de las cosas que tienen de Honduras, si acaso ya lo tomaron foto. Se
puede hacer click dos veces en la foto para que sale más grande. Si toca el botón que dice “expand” (expandir)
sale más información, incluyendo donde encontraron este objeto, quien lo donó,
en que año, etc. Aquí salen las piezas arqueológicas y etnológicas de Honduras
(incluyendo Jicaques, Sumus o sea Tawahkas y Mayagnas, Miskitos) del Museo Nacional de Historia Natural y el
Museo Nacional del Indígena Americana.
Hay fotos e información de muchas piezas de los viajes de William Duncan
Strong, incluso del Río Patuca y Río Wampu, pero solamente el pipante tawahka y
el canalete tawahka de Theodore Morde y solamente una pieza de piedra verde
tallado de Frederick A. Mitchell Hodges de Bonacca/Guanaja, Islas de la
Bahía. Hay piezas de Colon e Islas de la
Bahía de otras personas.
National Museum of the American Indian Search Collections
(Museo Nacional del Indígena Americano, Buscar en las Coleciones) en www.nmai.si.edu/searchcollections/home/aspx
La colección hondureña y de la Moskitia
Nicaraguense de la Fundación Heye ahora están en este Museo.
Se puede buscar por culturas (Culture) o por lugares
(Places) Todas las piezas de Honduras están clasificadas como Maya incluyendo
los del Valle de Ulua que probablemente son Lencas. Entonces se puede buscar por “place”. Luego hay que escoger si quiere ver
piezas arqueológicas (Archaeological Items) o Cosas Etnograficas (Ethnographic
Items). Luego donde dice “country”
(país) se puede poner “Honduras”.
Las piezas de
alfarería que Theodore Morde trajo de regreso para la Fundación Heye que fueron
clasificados como Chorotegas no están visibles por esta manera de búsqueda por
el Internet. Las piezas etnográficas que
tienen incluyen un rallador de yuca Garifuna, un Caramba o Arco Musical
Jicaque, y el Pipante y Canalete Tawahka de la expedición de Theodore Morde y
Laurence Brown. Tiene foto de la pieza
arqueológica que despertó el interés del Sr. Heye en la arqueología de la
Moskitia, y luego en la Ciudad de Mono Dios o la Ciudad Blanca—un armadillo
tallado de la piedra basalto que fue conseguido entre el Río Aguan y el Río
Coco en Honduras, posiblemente coleccionado con la ayuda de los Pech o los
Payas, que era en la colección privada de un médico de Nueva Orleans, Dr.
Joseph Jones.
Museo de Archaeología y Antropología,
Universidad de Pennsylvania.
“University of Pennsylvania, Museum of Archaeology and
Anthropology” (Universidad de Pennsylvania, Museo de Arqueologia y
Antropología) en https://en.wikipedia.org/wiki/University
_of_Pennsylvania_Museum_of_Archaeology_and_Anthropology
Penn Museum, Search Object Collections, Honduras (Museo
Penn, Buscar en Colección de Objetos, Honduras)
en https://www.penn.museum/collections/search.php?term=Honduras&submit_term=submit+Query
Este
museo tiene 525 piezas arqueologicas de Honduras, pero solamente 8 piezas
tienen fotos incluyendo un metate grande, 3 vasijas de marmol del valle de
Ulua. Ellos tienen piezas del Valle de Ulua, del Valle de Aguan, de Copan, e
Islasde la Bahía. Incluye
cerámica, piedra, hueso, obsideano (18 piezas), pedernal, jade (16 piezas), tres piezas de ópalos de Honduras, piedras
para pulir alfararía y un malacate.
Museo de Historia
Natural Carnegie y el Instituto Carnegie de Washington, DC
“Andrew Carnegie” en https://es.wikipedia.org/wiki/Andrew_Carnegie
“Carnegie Museum of Natural History” (Museo Carnegie de
Historia Natural) en www.carnegiemnh.org Este museo fundado por Andrew Carnegie no
tiene colecciones relacionadas con Honduras, pero muestra el interés de Andrew
Carnegie en la Historia Natural y Museos que dieron mayor realce a la ciudad
donde tenía sus negocios principales.
“Carnegie Institution for Science” (Institución Carnegie
para las Ciencias) en https://en.wikipedia.org/wiki/Carnegie_Institution_for_Science
Esta organización financiado por Andrew Carnegie financió
el trabajo del arqueólogo estadounidense Sylvanus Morley en Chichen Itza, en
Copan, y en otros sitios. El Instituto
Carnegie era controversial por su apoyo a la teoría y práctica de Eugenesia.
“Sylvanus Morley” en https://es.wikipedia.org/wiki/Sylvanus_Morley
Historia de la
Creación de Carreras de Antropología y Arqueología y sus Asociaciones Profesionales
en el Exterior
“American Anthropological Association” (Asociación
Americana de Antropología) en https://en.wikipedia.org/American_Anthropological_Association Fundado en 1902 por el antropólogo cultural Franz
Boas.
“American Association for the Advancement of Science”
(Asociación Americana para el Adelanto de las Ciencias) en
https://en.wikipedia.org/wiki/American_Association_for_the_Advancement
_of_Science.
Fundado en 1848, mediante una reforma a la Asociación de
Geólogos y Naturalistas, para incluir también antropólogos y lingüistas. Varios de los primeros arqueólogos como
Francis Putnam (1839-1915) y los primeros antropólogos como Franz Boas habían
estudiado disciplinas de ciencias naturales antes de enfocar sus carreras académicas
en arqueología y antropología. Muchos de los nuevos métodos de la arqueología
surgían de análisis hecho por geólogos.
“List of Antiquarian Societies” (Lista de Sociedades
Antiguarías) en https://en.wikipedia.org/wiki/List_of_antiguarian_societies La arqueología parcialmente surgió de los
intereses de los antiguarios quienes eran personas que estudiaron historia con
una atención particular en artefactos antiguos, sitios arqueológicos e
históricos, y/o archivos históricos y manuscritos. La mayoría de los
antiguarios eran los ricos. El señor Loubat (1831-1927) era un antiguario,
Frederic Putnam era miembro de la Sociedad Americana de Antiguarios y también
el rico que apoyó Edgar Thompson a estudiar Chichen Itza en México era un
antiguario de la Sociedad Americana de Antiguarios de Wooster, Massechusettes,
entonces el apoyo a la arqueología mesoamericana al comienzo surge de los
intereses de los antiguarios.
“History of Archaeology” (Historia de la Arqueología) en https://en.wikipedia.org/wiki/History_of_Archaeology Los
antiguarios comenzaron existir en los siglos 16 y 17 entre personas que les
gustaron coleccionar artefactos. Los antiguarios estudiaron historia con
atención especial a artefactos antiguos y manuscritos igual que sitios
históricos. Ellos dieron énfasis en
coleccionar artefactos y mostrarlos en sus casas en gabinetes para “curios”
(curiosidades). Al final del silgo 18 y en el siglo 19 los gabinetes personales
de “curios” se convertieron en grandes museos nacionales. Pagaron a personas de
salir y coleccionar artefactos para dar mayor realce a la colección de su
nación y mostrar hasta donde alcanzaba la influencia del país. En la década de
1880 la arqueología comienza a desarrollar técnicas propias para estudiar
civilizaciones antiguas y lo hace algo diferente que el simple saqueo. Durante
el siglo 20 la arqueología se profesionaliza más, hasta que a la mitad del
siglo 20, generalmente excavaciones de ruinas tenían por lo menos un arqueólogo
profesional.
Brownman, D. (2011) “Spying by American Archaeologists in
World War I” Bulletin of the History of Archaeology (Espionage por los
Arqueólogos Americanos durante la Primera Guerra Mundial, Buletin de la
Historia de Arqueología) 21(2) pp. 10-17
en www.archaeologybulletin.org/articles/10.5334/bha.2123 Este artículo identifica arqueólogos, artista
arqueológica, y un botánico estudiando la flora de ruinas arqueológicos quienes a la vez que
trabajaban en la arqueología en América Central también estaban trabajando como
espías para la Oficina de Inteligencia Naval (ONI) durante la Primera Guerra
Mundial. Estos incluyeron personas famosas en Honduras como Samuel Lothrop
(agente 173), y su esposa Rachel Warren
Lothrop (Agente 5-32) Sylvanus Morley (Agente 53), Frederick Wilson Poponoe (Agente 219), y H. Joseph Spinden
(Agente 56). Mientras estas personas
colaboraban con la ONI, un precursor de la CIA, las fundaciones o Museos que
les pagaban para trabajar en la arqueología centroamericana continuaron sus
salarios aumentando lo que recibieron de la ONI, como oficiales de la Reserva Naval o como
personal civil.
Fue hasta la
década de 1930 que se fundó una Asociación separada para arqueólogos—la
Asociación Americano de Arqueología (AAA). Muchos de los arqueólogos de esta
época trabajaban para el gobierno federal de los EE. UU. para estudiar restos
arqueológicos de los indígenas norteamericanos en parques nacionales y otras
tierras federales.
Bibliografía
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Indígenas Miskitos y Sumus de Honduras y Nicaragua). Washington, DC: Smithsonian Institution Bureau of American
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bibliotecas en Honduras).
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Mestizaje y Su Identidad Nacional en Honduras. San Pedro Sula: Centro Editorial.
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de Honduras. San Pedro Sula: Centro Editorial
Frewen, Cordelia A. (2012 ) “Redefining, Crafting, and Re/Presenting
Contemporary Ethnicities: Honduran National Identity, 1994-2006. (Redefinado, Formando, y
Presentando/Representando Etnicidades Modernas: Identidad Nacional Hondureña
1994 a 2006) Universidad de Denver, Tesis de Maestría. (Los tesises de maestría son disponibles para
la venta en Proquest.com).
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“Eugenics in the United States” (“Eugenesia en los EE.
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“Eugenesia en Estados Unidos” en https://es.wikipedia.org/wiki/Eugenesia_en_Estados_Unidos
Griffin, Wendy (1992) Historia de los Indígenas de la
Zona Nororiental de Honduras, Tomo II 1800 a 1992. Manuscrito inédito en
biblioteca de la UPN, del IHAH, y en la Universidad de Pittsburgh.
Gudmunson, Lowell & Justin Wolfe (2012) “La Negritud: Entre raza y raíces” San
José, Costa Rica: Editorial Universitario Estatal a Distancia (EUNED).
“La Ciudad Blanca” en https://en.wikipedia.org/wiki/La_Ciudad_Blanca Tiene información sobre los arqueólogos y
otros exploradores quienes han hecho investigaciones en la zona de la Biosfera
de Río Plátano y de la Ciudad Blanca desde el comienzo del siglo 20. La primera
investigación de un arqueólogo profesional del área donde se cree puede ser
ubicada la Ciudad Blanca fue la investigación de Sylvanus Morley de la zona costera de lo que ahora es la Biosfera
de Río Plátano mientras el hacía investigaciones para la ONI, particularmente
investigando si había bases para submarinos alemanes en la Costa Caribe de
América Central durante la Primera Guerra Mundial.
“Ciudad Blanca (Honduras)” en
https://es.wikipedia.org/wiki/Ciudad_Blanca_(Honduras)
Martínez, Juan Ramón (sin fecha) “Etnias Minoritarias:
Los Chinos de Honduras” en www.angelfire.com/cas/mas/etnias/chino/chino.html. El refleja sobre los intelectuales hondureños
quienes eran anti-chino y anti-negro en la década de los 1920. “El más
destacada de estos adversarios de chino y negros es Ramón Ernesto Cruz quien
será honrado por los hondureños con la Presidencia de la República que
ejerciera en forma éfimera y pecaría en la década de los setenta.”
Miralda Bulnes, Danira (2012) Latwan Laka Danh Takisa:
Los pueblos originarios y la guerra de baja intensidad en el territorio de la
Moskitia, República de Honduras, Tegucigalpa: Instituto Hondureño de
Antropología e Historia (IHAH). Su
primer título en Miskito signfica que
“el amor comunitario está acabando”.
Raphael, Leona
(1934) “Explorer Seeks Fabled Lost City: Spurns Weaker Sex
Companionship” (Explorador Busca
Legendaria Ciudad Perdida: Niega Llevar
Compañera del Sexo Más Débil) The Calgary Daily Herald, 16 June 1934, p. 34. en
https://news.google.com/newspapers?id=JxpkAAAAIBAJ&sjid=G3sNAAAAIBAJ&pg=1617,5791667
“Racismo Científico” en https://es.wikipedia.org/wiki/Racismo_cientifico
“Racismo en Estados Unidos” en https://es.wikipedia.org/wiki/Racismo_en_Estados_Unidos
Thomas, Lillian (2016) Next Page: “The Last Indian War”
waged at the Carlisle Indian Industrial School”
Abril 17, 2016 en www.post-gazette.com/opinion/2016/04/17/The-Next-Page-Native-Americans-were-sent-to-a-Cumberland-County-school-to-learn-to-be-white-writes-Lillian-Thomas/stories/201604700
(La Próxima Página: “La Última Guerra indígena” se llevó
a cabo en la Escuela Industrial para Indígenas de Carlisle”. ---La Página
Próxima, Indígenas nativos fueron enviaron a una escuela del Condado Cumberland
para aprender ser blancos escribe Lillian Thomas). La última guerra indígena se llevó a cabo en
contra de los niños indígenas según este artículo donde la escuela de Carlisle
tenía el lema “matar al indígena, guardar el hombre.” Esta escuela fue modelo para otras escuelas
indígenas con internado en los EE. UU. y en Canadá. Muchos de los problemas
actuales de los indígenas norteamericanos los indígenas creen que tenían
orígenes en la práctica de separar los niños indígenas de sus padres y abuelos
por muchos años para intentar que se olviden de sus culturas
tradicionales. Ha sido una lucha en los
EE.UU. y en Canada para que los indígenas pudieron tener educación local y que
los indígenas manejan el control de la educación de sus hijos.
Vallejo, Antonio R. (1888) Censo General de la República
de Honduras levantado el15 de junio de1887, Tegucigalpa, Honduras: Tipografía
del Gobierno. Dirección General de Estadistica en https://books.
google.com/about/Censo_general_de_la_República_de_Honduras.html?ide=GicgAAAAYAAJ&hl=es
Vallejo, Antonio R. (1997) Primer Anuario Estadístico:
correspondiente al año de1889. Tegucigalpa: Editorial Universitaria.
WorldCat (sin fecha) “Doris Stone 1909-1994” en
worldcat.org/identities/lccn-n83040033/ Nota
que ella escribió 99 obras en 344 publicaiones. Entre sus obras más importantes
para la arqueología hondureña son “Archaeology of the North Coast of
Honduras” (Arqueología de la Costa Norte
de Honduras) publicado por el Museo Peabody de Harvard en inglés en 1941, Archaeology of Central and Southern Honduras
(Arqueología de la Zona Central y Sur de Honduras) publicado por el Museo
Peabody en inglés en 1957, Arqueología
de la Costa Norte de Honduras publicado por el Museo Peabody en español en
1975, The Archaeology of Lower Central America (La Arqueología de la parte sur
de América Central) con Frederick Lange en 1984.
Comunicación
Personal
Antonieta Máximo, escritora, compositora, y actriz
hondureño estudió en la UNAH cuando solamente había estas dos carreras.
Don Jacinto, un anciano y líder Tawahka. Entrevistado en
Tegucigalpa.
Elizabeth Meigham, profesora de inglés al nivel segundario
y superior, estaba en el primer curso de entrar en la Escuela Superior del
Profesorado en 1956.
Dr. Rolland Paulston, profesor jubilado de Educación
Latinamericana de la Carrera de Educación Internacional para el Desarrollo de
la Universidad de Pittsburgh.
Tiburcio Carias, sobrino del General y Presidente
Tiburcio Carias, comunicación
personal mientras el estaba estudiante
de inglés en la UNAH.
Scott Wood,
profesor Miskito, encargado de educación bilingüe intercultural Miskito
por mucho tiempo, comunicación personal.
La siguiente escuela primaria en la Moskitia no fue establecido por el
gobierno de Honduras, sino por la Misión Morava en Brus Laguna en la década de
1950. Era una escuela bilingüe español-miskito. Cuando el gobierno de Honduras
se encargó de la educación de la Moskitia en la década de 1960, volvió la
política de una educación monolingüe en español y se continuó la política de la
españolización de los Miskitos, los Garífunas y los Isleños, tres etnias
afro-hondureñas cada uno con su propio idioma (Miskito, Garífuna, Inglés) que
el gobierno deseaba españolizar.
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