El Contexto Histórico de Las Tres o Cinco Expediciones de la
Fundación Heye a Honduras Nororiental
Wendy Griffin
Antes de la Segunda Guerra Mundial, la mayoría de las
expediciones arqueólogos de norteamericanos e ingleses eran financiados por
personas ricas quienes tenían un interés en la arqueología de lugares exóticos.
Desde el final del Siglo 19 muchos de los objetos arqueológicos o antropológicos
que trajeron de regreso fueron exhibidos en Museos, donde los Museos indican
quien era el donante de cada objeto. Era como una forma de lograr la inmortalidad,
de mantener su buena reputación antes y después de la muerte. También era una manera de facilitar la
educación sobre el mundo a los residentes de su ciudad, una manera de mostrar
el civismo. También era la continuación de prácticas de elites de todas
culturas de querer mostrar su riqueza, su sabiduría, y su poder a través de
obtener bienes exóticas de lejos, fuera del alcance de la gente común, y
mostrarlos
El colector más importante de la primera mitad del siglo 20
era un rico neoyorquino George Gustav Heye (1874-1957), quien logró tener un millón
de piezas antropológicos y arqueológicos. Él tenía su propio Museo en Nueva
York, el Museo del Indio Americano. Conquistó excelentes arqueólogos como
Marshall Saville de la Universidad de Columbia de venir a trabajar para su Museo. Heye comenzó su carrera como ingeniero de
construcción de ferrocarriles en el sudoeste de los EE. UU. donde miró por
primera vez artesanía indígena que comenzó a coleccionarla. Luego él fue
banquero inversionista en Nueva York por unos años. Su padre vendió su compañía de petróleo a los Rockefellers y
luego George Heye heredó este dinero.
Heye dedicó el resto de su vida a colecionar piezas y exhibirlas en su
Museo (Heye, Wikipedia, Preston, 2017).
Él tenía una Fundación que comenzó en 1916 para manejar los fondos y donaciones a su
Museo. Parte del elite de Nueva York
aceptó de trabajar en la Junta Directiva de su Fundación, incluyendo en
1920 Minor Cooper Keith (1848-1929), vicepresidente y co-fundador de la United
Fruit. Keith había comenzado el concepto de sembrar bananos en las tierras que
el gobierno Costaricense le dio por trabajar en el ferrocarril de Costa
Rica. Él tenía una colección privada de
alfararía y piezas de oro precolumbina de Costa Rica que el donó al Museo
Americano de Historia Natural y al Museo
de la Fundación Heye (Heye, Wikipedia, Keith, Wikipedia).
Las dos primeras expediciones de la Fundación Heye a
Honduras nororiental en 1934 y 1935 eran
a cargo del explorador y periodista Capitan
R. Stuart Murray. Estas expediciones
eran auspiciadas por el Presidente de Honduras Tiburcio Carias. Él quería abrir
la Moskitia hondureña a la colonización, pero antes de esto quería que se
estudiara las culturas vivas de la Moskitia y traer artesanías para un Museo
Nacional en Tegucigalpa. El Capitan Murray había aprendido español previamente luchando
en Santo Domingo, donde le hicieron Capitán. El aprovechó de su estadía en la
zona Miskita para obtener artesanía Miskita como tunu (tela de una corteza de
un árbol) y flechas utilizadas para la pesca con arco y flechas para el Museo
Americana de Historia Natural en Nueva York y el Museo del Indio Americano de
la Fundación Heye.
En Honduras en dos periodos han existido Museos Nacionales,
pero el primero Museo Nacional se cerró por que
había daño al techo del edificio que estaba causando que se ruinara la
mayoría de su colección y el gobierno no contaba con fondos para reparar el
techo, según el tesis de Maestría de
Cordelia Frewen (Frewen,2012) . Más
recientemente una ex—Primera Dama de la Nación esposa de Presidente Lozano Diaz
donó el edificio de Villa Roy para un Museo Nacional. Por un tiempo tenía
exhibiciones sobre las etnias de Honduras, pero luego se cerraron las
exhibiciones arqueológicas y antropológicas para poner un Museo de la Historia
de la Republica.
Se han hecho famosas las expediciones de Capitán Stuart
recientemente por que en una entrevista de periódico en 1934 él dijo que el
escuchó una leyenda entre la gente local en la Moskitia que existía una “Ciudad
Perdida del Mono-Dios”.( Rafael,1934)
Aunque generalmente se habla de solamente tres expediciones
de la Fundación Heye a Honduras nororiental, el escritor Doug Preston nota que
Heye anteriormente había mandado en dos ocasiones anteriormente a Honduras
nororiental a un aventurero inglés Frederick Mitchell-Hedges a buscar restos
arqueológicos en la Moskitia Hondureña. Heye había comprado un cusucu tallado
en piedra de un médico en Nueva Orleans quien le dijo que el origen del objeto
era la Moskitia Hondureña. La primera vez en 1930 Mitchell-Hedges llegó a Honduras nororiental, pero se enfermó
de dos de las tantas enfermedades tropicales allí, malaria y disentaria. Cuando
el regresó a Honduras la segunda vez, el principalmente quedó en Islas de la
Bahía (Preston, 2017). El escribió que él
participó en una de las guerras civiles de Honduras de aquel entonces apoyado a
Carias (Stonich, ). No era un
investigador serio y otros investigadores lo ha considerado como un fraude. Ya
existió la carrera de Antropología donde se enseñó la Arqueología en buenas
universidades de los EE. U.U., pero Heye escogió de no utilizar arqueológos
profesionales para los viajes de recolectar piezas de arqueología o de
antropología, sino aventureros. Frederick Mitchell-Hedges presentó Theodore
Morde al Señor Heye (Preston, 2017).
Parcialmente en base a estos rumores que escuchó George Heye
de la Ciudad de Mono Dios, en 1940 la Fundación Heye decidió de mandar a un
periodista norteamericano Theodore Morde con su colega Lawrence C.Brown, un
geólogo, para 1) estudiar los indígenas
nativos de la zona, 2)explorar los sitios arqueológicos de la zona, y 3)
explorar la zona de la cabecera del Río Wampu. Morde había previamente
aprendido español trabajando como periodista haciendo reportajes sobre ambos lados de la Guerra Civil en España que
trajo Generalísimo Franco al poder. Morde también trajo evidencia de oro, plata,
platino y petróleo en la región de la Moskitia:. (Morde, Wikipedia ).
En Honduras viajó bajando el Río Patuca. Él llegó al Río
Guampu llevado por nativos en pipantes con motor viajando por el Río Patuca. Según
un informe publicado en español, el habló con los indígenas Payas y Tawahkas
por el Río Patuca. Les contaron unas leyendas. Uno es sobre un personaje peludo
como un mono que llevaba tres doncellas Tawahkas. Este es una parte de la leyenda de sisimite
en Honduras.
También el dijo que un viejo Paya le contó sobre una ruina
con una piedra tallada en forma de un mono y con doble Escalante enfrente con
figuras talladas en piedra de un cocodrilo y una araña. Este Paya nunca estaba
en esta ruina, que ni los Pech ni los Tawahkas querían acercarse a este lugar
donde estaban enterrados los antepasados, pero este viejo Paya había escuchado
de tal lugar de los mayores.
Otra leyenda era sobre un Dios Wampai y una Princesa
Chorotega rubia quien se llamaba Oro quien se convertió en un pájaro
“margarita”. (Morde, 1940) Morde mató al pájaro sagrado de los Tawahkas
“Margarita”, para ser capaz de tomarla una foto, que causó escándulo entre los
Tawahkas (Video Busqueda de la Ciudad Blanca/Search for Ciudad Blanca Spanish
Version, Youtube).. Estas leyendas suena como si es posible que los indígenas
se le contaron. La otra parte del informe de Morde donde relaciona la creyencia
en un mono dios que lleva doncellas con el héroe Hindú de Hanuman, un mono
guerrero que lleva una doncella es pura imaginación de Morde.
En un lugar llamado
Uhlak (un espíritu de bosque entre los Tawahkas parecido el sisimite Ladino o
kisi Miskito) los indígenas le dejaron. En
reportages publicado en los EE. UU. y
una entrevista por radio de CBS,, el dijo que caminando de allí, el encontró una ruina la cual el consideró
pudo ser la Ciudad de Mono Dios. Él pensaba que este pudo ser lo mismo que la
Ciudad Blanca. Siguiendo a Morde, el libro de 2012 Jungleland, también pensaba
que la Ciudad Blanca y la Ciudad de Mono Dios eran iguales.
El Fraude de Theodore Morde Revelado en un Nuevo Libro
Morde se ha hecho famoso por descubrir la Ciudad de Mono
Dios, la ubicación de lo cual el no reveló antes de su muerte por suicidio.
Pero según Doug Preston en su análisis de los libros de campo completos de
Morde y Brown, el reportaje de este hallazgo era un fraude. Nunca subieron el
Río Guampu. Continuaron más al sur por el Río Patuca, hasta llegar al los ríos
Cuyamel y Blanco. Uhlak era una Quebrada de este. Ellos pasaron tres semanas, la
mayoría de su tiempo en Honduras lavando oro. Ellos habían traído equipo
especial para lavar oro, y parece que sabían dónde un norteamericano había
dejado su equipo para lavar oro anteriormente.
Esta era una acción ilegal ya que en Honduras aun las minas de oro
aurífero era necesario tener una concesión del gobierno central de Honduras. Las
lluvias fuertes rompieron su represa para controlar el agua donde lavaron oro,
y tenían que subir a la Costa (Preston, 2017).
Otros investigadores para la Ciudad Blanca fueron
originalmente atraídos a la zona en búsqueda de oro como Ted Danger quien hizo
el video “Search for Ciudad Blanca Spanish Version” (Busqueda para la Ciudad
Blanca Versión en Español) en Youtube, y el señor Glassmire, mencionado
por Preston, pero Morde hizo lo opuesto. Era pagado a
buscar la Ciudad Blanca y utilizó el tiempo para lavar oro (Preston, 2017). Ya
era sabido en los EE. UU. por un libro escrito en inglés del Señor Keenagh (1933) que había oro por el
Río Patuca, pero parece que Morde tenía conocimiento anterior de una quebrada
especifica donde era posible lavar oro por Río Blanco.
Pero ¿como iban a contestar al Señor Heye quien gastó mucho
dinero para traer artefactos de la Moskitia y si fuera posible encontrar la
Ciudad de Mono Dios? Ellos pararon en Brus Laguna y excavaron durante un día un
sitio que un Español les señalaron que había piezas de alfararía. Posiblemente
también compraron piezas arqueológicas de los nativos en Brus, pero no menciona
hacer esto en su diario de campo. Las piezas arqueológicas que ellos
entregraron al Señor Heye que ellos identificaron según Spinden como de la
cultura Chorotega son de un sitio arqueológico conocido por los hondureños cerca Brus (Preston, 2017).
Morde avisó a Heye y al New York Times que había encontrado
la Ciudad de Mono Dios y el hizo entrevistas y publicó artículos sobre el
hallazgo que resultó ser un fraude. Morde no dio sus diarios de campo al señor
Heye, lo cual era poco típico para este tipo de viajes financiados por una
institución. Su familia no prestaron la
versión completa de los diarios de campo, diciendo que se había perdido la
parte donde el dice que encontró la ciudad de Mono Dios. Solamente después que el sobrino de Morde fue
enviado al cárcel por un crimen, la esposa del sobrino sin saber del fraude
anterior prestó los tres diarios completos de Morde a National Geographic quien
escaneó una copia para Doug Preston (Preston, 2017). Ha existido desde hace tiempo dudas si Morde
de veras encontró una ciudad en ruinas tal como él explicó, y ahora sabemos la
verdad, que no encontró tal ruina. El fraude fue revelado al fin. Morde trajode regreso piezas arqueológicas pero
eran de un ruina cerca a Brus Laguna que un español le dijo que había piezas de
alfarería allí.
¿Cáal es la Relación entre el Mito de la Ciudad de Mono Dios
y la leyenda de la Ciudad Blanca?
La leyenda de la Ciudad Blanca es basada, en parte, en un mito de los Pech de “Kao Kamasa” (Casa
Blanca), en un reportaje de un mulato al comienzo del siglo 20 según Conzemius,
una leyenda de los Nahuas sobre una ciudad donde se refugiaron los Nahuas y su
oro durante la Conquista Española, unos informe de españoles coloniales sobre
una ciudad rica en la Moskitia Hondureña llamada en aquel entonces Taguzgalpa y
aun una leyenda Azteca sobre la Muerte de Quetzalcoatl, rey de los Toltecas,
pero la Ciudad de Mono Dios parece ser otra ruina en Honduras, y no la Ciudad
Blanca de los Pech. Morde, Chris Stewart, autor de Jungleland (Tierra de la
Selva), y Doug Preston, autor de The Lost City of the Monkey God (La Perdida
Ciudad del Mono Dios) escriben como si fueron la misma leyenda, pero las
leyendas de Ciudad de Mono Dios parecen tener una base diferente que las
leyendas Pech de Kao Kamasa o la Casa Blanca.
Aun que es
generalizada en Honduras nororiental la creencia en sisimites o sea humanos
altos peludos como un mono ( o kisi en Miskito, uhlak en Tawahka, Takaskró en
Pech) y común la creencia que el sisimite robó una mujer humano con quien tuvo
un hijo, generalmente no hay relación entre los mitos que son las bases de la
leyenda de la Ciudad Blanca, y las
leyendas del sisimite o su hijo.
¿Quién será el Mono Dios?
Entre los Nahuas de México el hijo de sisimite con una mujer
humana se llamaba Nahuehue (el gran o mero mero Na) y logró ser capitán de los
4 Dioses de relámpagos, trueno y lluvia de las 4 direcciones cardinales , y él
era el Dios del Centro. Los Dioses de los relámpagos a solicitud de las
personas humanas hicieron caer los relámpagos sobre la montaña de subsistencia,
donde las hormigas mostraban que adentro había maíz. Las personas robaron el
maíz mientras descansaban los Dioses de relámpagos. Pero ellos no sabían como
sembrar maíz. El Capitán de los Dioses de relámpagos después de negar de
enseñarles, finalmente aceptó de enseñarles sembrar Milpa. Esta leyenda
mexicana de los Nahuas fue recopilado en un libro de Dr. James Taggart, en un
libro que se llama The Bear and His Son (El Oso y su Hijo) (Taggart, ).
Parece que el Dr. Taggart lo dio el libro y el mito este nombre, por la
confusión de la palabra nahua para mono “oso”
(según el linguista Terrence Kaufman) y la palabra español “oso” que
identifica un animal que no reside ni en México ni en Honduras.
En Honduras entre los
Ladinos, se cuenta del sisimite (en México tzitzimite, en El Salvador Xiximite,
la palabra es de origen nahua), un ser medio humano-medio mono, alto y peludo
quien lleva a una mujer humana con quien tiene un hijo. El sisimite maltrata a la mujer y el hijo
pregunta por que no se escapa del maltrato. La mama dice que tiene miedo. El
hijo crece y mata al papa el sisimite y lleva a su mama donde los humanos. Entonces la primera parte de la leyenda de
los mexicanos o nahuas se ha quedado en Honduras entre sus descendientes
Ladinos o mestizos en Honduras. En la Sierra de Agalta de Olancho, Honduras
todavía cuentan de personas llevados o matados por el sisimite, entre los
Ladinos y los Pech.
Entre los Miskitos el ser alto y peludo que vive en el
bosque es el “kisi”. Hay tantas leyendas Miskitas de los kisis que una palabra
para leyendas en el idioma Miskito es “kiska” (cuento del kisi). La palabra “kisi” entre los Miskitos quienes
son una mezcla de africanos con indígenas locales, probablemente viene de la
palabra africana “nkisi” que significa “espíritu de la naturaleza” y
probablemente fue aplicado por los africanos a las leyendas de sisimite que
escucharon de los indígenas locales. Uhlak
es un ser alto y peludo que vive en la selva según los Tawahkas. Además de leyendas generales sobre el
sisimite, los Pech dice que la leyenda del gigante Takaskro quien robó una
mujer Pech (Flores y Griffin, 1991), que el era un sisimite (Juana Carolina
Hernandez, comunicación personal.).
El hecho que unos reyes Pipiles utilizaron como nombre
personal “Xiximite” (Wikimepdia señorio deCuszcatlan) , y los pipiles eran un
grupo que hicieron guerra a sus vecinos y llevaron captivos para el sacrificio
humano y para ser esclavos, puede ser parte del origen de las leyendas
hondureñas de un sisimite que lleva gente.
¿Cómo Pudo llamarse la Ciudad de Mono Dios en idiomas indígenas de
la zona?
Un lugar dedicado a
Nahuehue puede llamarse en Nahua Naco (-co significa lugar de, y Naco el lugar
de Na). Existía un centro urbano
precolumbino importante en la frontera entre Santa Barbara y Cortés que se
llamaba Naco (Strong et al. ) . Es
posible que existía otro Naco en la Moskitia. Un centro ceremonial dedicado al
Nahuehue, el hijo del sisimite, pudiera tener muchos metates o piedras de moler
ceremoniales grandes como en las ruinas en la zona de la Ciudad Blanca, para
recordar su parte en el mito de obtener maíz y abrir la montaña de subsistencia
y para enseñar sembrar milpa.
La forma de un templo
sobre un montículo con doble escalanata como reportó Morde era una forma de
templos entre los Toltecas de habla Nahua. Hay otras ruinas con señales de
influencia Tolteca en la zona nororiental de Honduras, por ejemplo un posible
observatorio Tolteca cerca a San Esteban, Olancho en el Valle de Agalta. Pero
la ruina que encontró el equipo de National Geographic que el presidente de
Honduras ha dado el nombre La Ciudad del Jaguar no muestra este tipo de
arquitectura. Son ruinas de adobe y bahareque (Preston, 2017), lo cual
posiblemente indica Nahuas y Lencas. Según el etnohistoriador Robert Carnack,
en el Valle de Olancho y en el Valle de Agalta, vivieron Lencas con señores
Nahuas (Carnack et al.,1996 ).
¿Que pasó con las piezas arqueológicas que llevó Morde de la
Moskitia Hondureña?
Morde reportó que el tomó fotos de la ruina que el miró,
pero por un accidente de cayuco, se ruinaron las fotos de la ruinas, aunque
otras fotas de su expedición sobrevivieron. Parece según sus diarios de campo
que nunca miró una ruina con templos y nunca tomó tales fotos (Preston, 2017).
El también llevó muchas de piezas arqueológicas que el dio al Museo de Indio
Americano de la Fundación Heye como prueba que el encontró la ruina por haber
financiado el viaje. Ya hemos notado que
estas piezas eran de una ruina cerca a Brus Laguna, por la Costa y no cerca a
la zona Pech.
Actualmente estas piezas arqueológicas de la expedición de
Morde, igual que todas piezas del Museo de la Fundación Heye, están en el Museo Nacional de Indígena
Americano, ahora en Washington, DC. Forma parte del Instituto Smithsonian.
Morde pensó que esta cultura prehispánica que hizo estas piezas arqueológicas
era los Chorotegas (este es el nombre del tribu en Mangua, también son llamados
Cholulatecas en Nahua, de donde viene el nombre del Departamento de Choluteca
en Honduras.)
Antes que la Fundación Heye aceptó pasar la colección de
George Gustav Heye al Museo Nacional de Indígena Americano y la Smithsonian, el
Congreso Nacional de los EE.UU. pasó una ley que los objetos en la colección
Heye eran exentos de leyes de repatriación. Además de las piezas arqueológicas
que trajo Morde y artesanías Miskitas que trajo Capitan Murray, cuando el
Instituto Smithsonian abrieron las cajas de alfararía centroamericana
precolumbina que les entregaron el Museo de la Fundación Heye, encontraron 16,000 piezas de alfararía centroamericana
precolumbina incluyendo 10,000 ollas intactas. En 2013 el Museo Nacional de Indígena Americana junto con el
Centro Ladino de la Smithsonian hizo una exhibición preciosa de bonitas piezas
arqueológicas centroamericanas, incluyendo de los Lencas (cultura de Ulua) y de
los Maya Chortis de Honduras, y los Pipiles de El Salvador, pero no incluyeron
las cerámicas que trajeron Morde de la Ciudad Blanca.
A su regreso a los EE. UU. los periódicos Hearst le publicó un artículo de Morde sobre su hallazgo en Honduras que fue publicado en 1940 el Suplemento Dominical de los periódicos de esta cadena de periodicos con una ilustración de Virgil Findlay sobre el posible “Ciudad de Mono Dios”. Parece que noticias del artículo llegaron rápidamente a Honduras que en 1941 la UNAH publicó una libro con la traducción del artículo de Morde. Más tarde el Ministerio de Cultura y Turismo también logró una traducción al español del artículo de Morde que hay una copia en la biblioteca del IHAH. Tiene fecha de 1939, lo cual no puede ser la fecha de la traducción, por que Morde viajó en 1940 y en 1940 Honduras aun no contaba con un Ministerio de Cultura según el escritor Julio Escoto.
Además de traer noticias de una ruina en la Moskitia Hondureña,
Morde trajo fotos de los indígenas de la zona y dijo que miró evidencia de oro,
plata, platino, y petróleo en la zona. Morde
nunca quiso divulgar exactamente donde estaba la ruina que el encontró, por
miedo de saqueadores. Después de salir de Honduras el estaba parte de la OSS,
el servicio de inteligencia de los EE. UU. antes de la CIA, durante la Segunda
Guerra Mundial, además de ser periodista en la zona de guerra de África del
Norte. Su último trabajo era como asesor del gobierno de Egipto. Se suicidó sin
regresar a Honduras para mostrar que era cierto que el había encontrado una
ruina importante en Honduras (Morde, Wikipedia).
¿Será la Ciudad del Jaguar de National Geographic la Ciudad de Mono Dios que Buscaba Señor Heye?
Según Doug Preston esta ruina encontrado en 2015 tenía una
piedra grande tallada en la forma de una
calavera de un mono, el señor Preston, escritor profesional de novelas de
detectivos, cree que se puede decir que han encontrado la Ciudad de Mono Dios,
de la leyenda que escuchó Capitán Murray en la Moskitia en 1934. Las leyendas
con frecuencia tienen un elemento de la historia oral. Como las leyendas de la Ciudad Blanca no
tienen elementos que permiten identificar una ruina especifica con la Ciudad
Blanca, como advierte el Dr. Chris Begley.
No es posible decir que esta ruina es la mera Ciudad Blanca y mucho
menos que es “Kao Kamasa” (Casa Blanca) de las leyendas Pech. El término Pech “Kaja Kamasa” que se ve en
los periódicos hondureños y en el libro de Doug Preston es la traducción Pech
de Pueblo o Ciudad Blanca, pero el nombre correcto de la ruina donde
desapareció el héroe Pech Patakako es “Kao Kamasa”.
Si los Pech saben cuales de las ruinas de Olancho y la
Moskitia hondureña es la mera Kao Kamasa ellos no lo cuentan, por que según
ellos el sitio es sagrado, solamente el chaman Pech debe entrar. No quieren que
sea investigado por arqueólogos, cercado, y sus piezas sacadas para exhibir en
Museos. Los Miskitos advierten que el gobierno hondureño quiere concesionar la
Ciudad Blanca aun antes de encontrarla y no están conformes que el gobierno
hondureño ha permitido que se llevaran las piezas arqueológicas de la Ciudad
del Jaguar. Los Miskitos reclaman el
derecho del sitio, por que formaba parte de la Costa de los Miskitos antes que
este se pasara al control del gobierno de Honduras.
Una etnia mistiosa que cuentan los Miskitos que vivieron
antes en la Moskitia hondureña eran los Rah. Ellos eran muy belicosos y tenía
costumbre de comer gente. Según los Miskitos los Rah antes se extendieron en
Colon también hasta llegar al Valle de Aguan. Durante la época colonial los Rah
atacaron hasta a los españoles de Trujillo.
Los Miskitos y los Rah lucharon en guerras, y los Miskitos lograron
controlar hasta el Valle de Aguan. Los Rah, tras las guerras con los Miskitos y
las enfermedades europeas, quedaron como un grupo reducido viviendo cerca a
Ahuas por el Río Patuca y en el Valle de Auka. La mayoría de los Rah cerca a
Ahuas, en Raititara (cimentario grande en Miskito) era envenados por orden del
Rey Miskito por el crimen de comer un bebé mixto Rah-Miskito. Los restos de los
Rah mezclaron con los Miskitos. Hay información sobre los Rah en el libro de
historia oral Miskito por un profesor Miskito Scott Wood “La Moskitia desde
Adentro.” (Wood Ronas, 2013 ) Hay Miskitos
quienes cuentan que son de ascendencia Rah, como el escritor Miskito Erasmo
Ordoñes de Ahuas. Es posible que los Rah
eran constructores de parte de las grandes ruinas que se encuentran en la
Moskitia oriental, entonces por ser descendientes parcial de los Rah, los
Miskitos también tienen unos derechos a estos antiguales.
Alguna etnia precolumbina de la Moskitia si tenía un interés
fuerte en monos. Ellos los han tallados sus cabezas en piedras duras en la
Moskitia (los petroglifos). Yo he visto en el Museo de Trujillo una pieza
arqueológica de piedra con ropa y un tocado de tela pero cara de mono, como uno
piensa puede ser un Mono-Dios. En el subterraneo por la Grande Piedra Escrita
(Walpatara) por el Río Plátano, los Pech dicen que hay calaveras de monos. La
mayoría de las etnias de la Moskitia comen monos. Puede ser que había una ruina en la Moskitia
hondureña que inspiró la leyenda de la ciudad perdida de Mono-Dios que reportó Murray. No sabemos
ninguno detalles sobre esta ruina, entonces sería difícil relacionar una de las
ruinas con la leyenda.
Ninguna ruina en la Moskitia ha sido estudiada en suficiente
detalle para identificar cuales eran los Dioses que se adoraban allí. En la Biosfera de Río Platano, se encuentran
talladas en piedra cabezas de Quetzalcoatl, un Dios asociado con el viento, la
lluvia, y el siembro de maíz (Yourtube,video Search for Ciudad Blanca Spanish versión).
La cabeza de were-jaguar de la Ciudad del Jaguar parece a los were-jaguares
mesoamericanas que son derivados de Dioses de la lluvia. Las otras figuras son de zopilotes (palabra
de origen nahua) y de serpientes, que son comunes en la zona y tienen
importancia en diferentes culturas hondureñas. Las vasijas de piedra que
encontraron pueden ser donde colacaban el corazón del sacrificado humano, que
las leyendas en la zona también hablan de sacrificio humano. Es importante lo que encontraron el equipo de
UTL y National Geographic, encontraron una ciudad perdida, de una civilización
que aún existe una controversia sobre quienes eran, un oferatorio de piezas
arqueológicas de piedra y de alfararía que se puede comparar a oferatorios
parecidos por ejemplo en Jamasquire, Catacamas, Olancho donde aún viven los
descendientes de los Nahuas y Lencas coloniales del valle de Olancho, pero es muy difícil relacionar una ruina
arqueológica con una leyenda, sea la leyenda de la Ciudad Blanca o sea la
leyenda de la Ciudad de Mono-Dios o la leyenda de los Rah.
Bibliografía
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History and Culture of a Native American civilization. Upper Saddle River, NJ:
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Contem´rary Ethnicities: Honduras National Identity 1994-2006, University
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en Httpa://en-wikipeda.org/wiki/George_Gustav_Heye.
“Minor Cooper Keith” https:/ /en.wikipedia.org/wiki/Minor_Cooper_Keith
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Preston, Douglas (2017) The Lost City of the Monkey God: A True Story, New
York: Hachette Book Group. (La Ciudad Perdida del Mono-Dios: Una Historia
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”Raphael,Leona .( 1934)
“Explorer Seeks Fables Lost City: Spurns Weaker sex Companionship” Calgary Dai ly
Heraldo, 16 June1934, p.34.
Yourtube video “Search for Ciudad Blanca Spanish versión” (Búsqueda para la Ciudad Blanca versión en
español) https://www.youtube.com/watch?v=6gEiWYzNzuk.
(Stonich, Susan (2000) The Other Side of Paradaise: Tourism,
Conservation,.and Developmentin the Bay Islands”, New York,Cognizant
Communication Corporation.
Wood Ronas, Scott (2013) La Mosquitia desde Adentro,
Tegucigalpa: Secretaria de Cultura,Artes,y Deportes.